El saquito de semillas de trigo para las cervicales

Hoy escribo para contar un hecho sorprendente que está ocurriendo en mi casa:
Esta mañana ha llamado una chica por teléfono, ha hablado con mi padre, le ha dicho que llamaba de laboratorios BAYER y que si le interesaba comprar un saquito de semillas de trigo para las cervicales.
Mi padre ha contestado: "Bueno, pues no sé, tendría que ver el saquito".
Y entonces han concertado una cita por teléfono para ver el saquito.
A pesar de mi insistencia para cancelar la cita, mi padre ha hecho caso omiso y a los 15 minutos de colgar ya estaba aquí la chica del saquito.
Como yo soy contraria a que vengan personalmente a casa las chicas de laboratorio BAYER a vendernos saquitos de semillas de trigo para las cervicales, me he encerrado en mi habitación a escuchar el desarrollo de los acontecimientos, que está siendo más o menos el siguiente:
-Buenos días, señor Jorge.
-Buenos días.
-Soy Pepita Pascualita, soy fisioterapeuta y trabajo para laboratorios BAYER.
-¿Para quién?
-No me diga que no conoce los laboratorios BAYER, los que comercializan la Aspirina, la "Sivastatina"..
-Ah, sí, sí.
-Bueno señor Jorge, antes de nada quiero hacerle un cuestionario de salud. Por favor, siéntese, que si no parece que me está echando.
-Es que tengo la partida de dominó a medias, y tenía un poco de prisa...
-No me diga que juega al dominó por internet, si es mucho más entretenido bajar a echar la partida al bar...
-Bueno, pues yo juego por internet.
-Claro, que su mujer se quedará mucho más tranquila si lo ve jugar en casa y seguro que no le hace mucha gracia que baje al bar...
-...
(Aquí, mi primer WTF!!)
-Bueno señor Jorge, pues como le decía, soy fisioterapeuta y voy a hacerle un cuestionario de salud muy rápido, cuatro preguntillas nada más: ¿Qué edad tiene?
-60
-¿Y su mujer?
-56
-¿Tienen hijos?
-Sí
-¿Cuántos?
-2
-¿Qué edad tienen sus hijos?
-24 y 28
-Del 1 al 10, ¿qué puntuación daría ahora mismo a su estado de salud?
-Un 9
-¿Y al de su mujer?
-Otro 9
-¡No me diga! ¡Madre mía, esto es increíble! ¡Qué matrimonio más saludable! ¿Y no tienen ninguna enfermedad?
-Pues... no.
-¿Seguro? ¿Nada?
-No
-¿Dolores de huesos? ¿Cervicales?
-No
-¿Seguro?
-Bueno... los normales.
-¿De la edad?
-Supongo
-¿Y cuáles son para usted los dolores normales de la edad?
-Bueno, pues... algún músculo duele, de vez en cuando...
-Y permítame preguntarle, señor Jorge, ¿qué clase de colchón tiene?
-Pues uno normal de muelles, de los de toda la vida.
-¡Uuuuuuuy, madre mía, qué horror! ¿No sabe usted que los colchones de muelles son lo peor para los huesos?
-Bueno, hasta ahora no hemos tenido problema.
-¿Cuánto hace que tienen el colchón?
-No sé.. unos 4 años.
-¡Imposible, señor Jorge! Y le voy a decir por qué.. Los colchones de muelles dejaron de fabricarse hace 5 años, así que como no lo compraran de restos de stock, es imposible.
-Bueno, 4 años, 5 años, no sé, no me quedé con la fecha.
-¿Y sus hijos? ¿Qué colchón tienen?
-Pues también, de muelles.
-Madre mía, van a tener todos un montón de problemas de columna.
-Bueno, ya le digo que hasta ahora no..
-Se lo digo porque yo soy fisioterapeuta, y me interesa que tanto usted como su familia tengan un descanso de calidad.
-Ah, si yo descanso muy bien.
-Usted dormirá muy bien, pero su cuerpo no descansa.
-Ya le digo yo, que sí descansa.
-¿No tiene problemas de sueño?
-No. Yo duermo muy bien.
-Bueno, y yo también duermo muy bien cuando me quedo dormida en el sofá de mi casa, pero al día siguiente me levanto hecha polvo y me duele todo el cuerpo.
-Pues..
-Se lo comento porque laboratorios BAYER ha sacado una gama de colchones de viscolatex que bla, bla, bla.. y los promociona Anne Igartiburu, pero claro, a nosotros nos interesa que lo prueben los usuarios, porque uno se lo puede creer cuando se lo cuenta Anne Igartiburu que no sé si sabrá usted que tiene un caché muy alto, pero al fin y al cabo uno puede pensar que a esta mujer la están pagando por promocionar los colchones.
-Claro
-Y no sé si usted se mueve por las redes sociales, pero ya le aseguro yo que sus hijos sí, y lo que a nosotros nos interesa es que los clientes que estén satisfechos sean los que hablen de nuestros colchones a sus amigos, en las redes sociales..., así que si me permite un momentito, le voy a comentar los precios. ¿O tiene prisa por volver a la partida?
-No, si la partida ya la he perdido..
-Ah, ya la ha perdido. Bueno, pues entonces le comento, en el Corte Inglés un colchón como el nuestro vale ???? euros. ¿Qué le parece?
-Pues sinceramente, no sé a cuánto están ahora los colchones.
-Pues ya se lo digo yo, a ese precio en el Corte Inglés, pero si lo compra con nosotros puede pagar a ... euros al mes en .... cuotas. ¿Qué le parece?
-Bueno, pues más cómodo que en el Corte Inglés.
-Bueno señor Jorge, no sé qué clase de estudios tendrá usted, pero cualquier usuario puede darse cuenta de que con laboratorios BAYER la compra es mucho más económica. Aunque seguro que usted no se gasta .... euros en un colchón sin consultarlo con su mujer, ¿verdad?
-No, ni en un colchón ni en nada, no me gasto yo .... euros.
-¿Qué medidas tiene su cama?
-Tanto x tanto
-¿Y la de sus hijos?
-Tanto x tanto
-Pues nuestro colchón le saldría a .... euros por ser una medida especial, y para sus hijos se quedaría en ... euros. Qué le parece.
-Muy bien, pero es que yo no tengo ningún interés en comprar ningún colchón.
-Piénselo señor Jorge, que a la larga sus cervicales le pasarán factura. Además BAYER ofrece otros tratamientos a sus usuarios, y está dispuesto a subvencionar 2/3 del coste total de cada tratamiento para los usuarios que necesiten alguno.
-Bueno, pero ya le digo que de momento no tenemos ningún problema.
-¿Sabe cuándo me dará la razón? Cuando se levante un día con un dolor horrible de columna, y entonces pensará, ¡qué razón tenía aquella fisioterapeuta que vino a casa aquella vez!
-Sí, bueno, pero vamos, que de momento se lo agradezco mucho, pero no estoy interesado en comprar ningún colchón.
-Bueno, bueno, pues ya se acordará de mí. El saquito sí me lo pagará después de haber venido hasta aquí, ¿no?
-Bueno, vamos a ver, ¿para qué vale el saquito?
-Hombre señor Jorge, son 5 euros, usted me ha hecho venir hasta aquí...
-Sí, muy bien, y usted me ha contado todo lo que me quería contar, y yo la he escuchado muy bien, pero antes de comprar el saquito me gustaría saber para qué es.
-Pues es un saquito de semillas de trigo, muy útil para los dolores de cervicales, y se puede calentar al microondas. Ya le digo, que ya que he venido hasta aquí, y son 5 euros...
-Bueno, pues tome, aquí tiene los 5 euros, muchas gracias.
-A usted, señor Jorge. ¿Seguro que no quiere un colchón?
-No, ya le digo que no.
-Bueno, pues aquí le dejo mi tarjeta, por si se lo piensa mejor y lo habla con su mujer, o si tiene algún amigo con problemas de columna... además me puede llamar a este número para una sesión de fisioterapia, que son tan sólo 60 euros por sesión.
-Bueno, pues muy bien, muchas gracias. Adiós.

Desde mi 1er WTF, ha sido un WTF tras otro...
Y luego le he dicho a mi padre: acabas de darle 5 euros por una charla coñazo de 10 minutos. Tendría que haberme hecho yo fisioterapeuta!!

La noticia de La Princesa en El País

Aquí copio la noticia que se ha publicado en El País.

Los trabajadores —todos: desde la celadora hasta el jefe de servicio, pasando por el investigador y el médico residente— aún están enshock.Nadie se explica la decisión que anunció el miércoles el presidente regional, Ignacio González: el hospital de la Princesa, con 160 años de historia, con investigación puntera, hiperespecializado en áreas como la neurocirugía y la hematología, con centenares de estudiantes de medicina y enfermería en formación, se va a transformar en un centro “de alta especialización” en las patologías de los mayores de 75 años. No será “un geriátrico ni un centro de media y larga estancia”, según el consejero de Sanidad, Javier Fernández-Lasquetty. ¿Qué será entonces? Nadie lo sabe. No existe precedente alguno.

El hospital de la Princesa, el centro público de alta complejidad mejor valorado por los pacientes en 2011, se desmantela para poner en marcha un proyecto del que ni siquiera el propio gerente estaba informado hasta el miércoles pasado. El hospital, situado en un edificio de 12 plantas en pleno centro de la capital, atiende a una población de 313.000 personas. Solo 39.400 —los mayores de 75 años— podrán seguir usándolo: el resto deberán cambiar de centro. ¿Qué consecuencias tendrá sumar 273.600 nuevos pacientes a las urgencias y las consultas de otros hospitales de la capital? Es una más de las muchas incógnitas que rodean esta decisión. Las respuestas de los responsables políticos suenan a improvisación: “En otros lugares”, respondió Lasquetty sobre dónde serán atendidos tras el cambio.

Las urgencias de La Princesa cerrarán. Desaparecerán servicios clínicos altamente especializados como neurocirugía, cirugía maxilofacial, torácica y cardiaca, según denuncia la junta técnico asistencial del centro (órgano que representa a sus profesionales). También parte de los laboratorios, y ello pese a que el año pasado la Comunidad de Madrid remodeló completamente el de microbiología (570.000 euros), que participa en un programa internacional sobre infecciones en trasplantados. “La Comunidad convierte al hospital de la Princesa en el primero de España con neurocirugía en 3D”, se promocionaba el Gobierno regional hace apenas un par de años. Solo el equipamiento costó cerca de un millón de euros. La reforma de la unidad de trasplante de médula se inauguró en enero pasado. Según la escasa información que manejan los profesionales, la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI), la unidad coronaria y la de ictus —una de las únicas seis de la región— tampoco tienen sentido en un hospital para mayores de 75 años que ingresarían derivados del Gregorio Marañón y el Clínico.

El futuro de esas inversiones, de los múltiples proyectos de investigación en marcha, de las dos unidades de referencia nacional y de la docencia queda, por tanto, en el aire. “Como usuaria y contribuyente, espero que lo que se ha construido aquí no se pierda. Es una millonada en dinero público”, decía María Jesús, celadora, durante la asamblea que, el viernes pasado, reunió a centenares de trabajadores de todas las categorías en el abarrotado salón de actos del centro. Decidieron iniciar un encierro, que aún continúa, y empezar a organizarse para evitar el “desmantelamiento” de La Princesa. Llevan días, desde que conocieron la noticia, protestando y cortando el tráfico en la calle de Diego de León.

“Me volví de Estados Unidos porque creo en la sanidad pública. Sin laboratorio y sin pacientes yo no puedo investigar ni publicar”, dice Adrián McNicholl, especializado en enfermedades hepáticas. “El instituto de investigación tiene compromisos con el ministerio y con Europa. ¿Qué va a pasar con ese dinero? ¿Se pierde?”, se pregunta otro investigador que se dedica a la inmunología con un contrato posdoctoral Miguel Servet (Instituto de Salud Carlos III).

Cerca de 300 médicos residentes se forman cada año en La Princesa. “No sabemos qué pasará con nosotros, pero tengo claro que estar en un hospital sin unidades de investigación, sin docencia y sin urgencias no tiene sentido para mí”, dice Luis, residente de reumatología. “No se aprende lo mismo en un hospital geriátrico que en uno general. Sin servicios especializados no puedes potenciar la medicina interna”, señala otro residente, primero de su promoción, que escogió La Princesa entre todos los hospitales del Estado para formarse en esta especialidad. Los MIR, que eligen su plaza por oposición, ven el desmantelamiento del centro en el que tenían previsto especializarse durante cuatro o cinco años como una especie de fraude.

“Un tremendo problema”

 Además de estudiantes y residentes, la Universidad Autónoma de Madrid tiene a varias decenas de profesores (catedráticos, titulares, asociados...) en el hospital. “Creo que la decisión se ha tomado sin contar con que se trata de un hospital universitario”, opina el decano de Medicina Juan Antonio Vargas, que califica los planes del Gobierno regional de “sorpresa absolutamente negativa” y “un tremendo problema”. “No sé quién habrá participado en esto”, señala. “Si nos lo hubieran planteado, nuestra posición hubiera sido contraria. De hecho, haremos lo posible por evitarlo. Ojalá podamos revertirlo. Estamos obligados a intentarlo”, añade.

“Ahora mismo tenemos unas 200 camas cerradas, las mismas que tiene abiertas el hospital de Coslada \[de gestión semiprivada; uno de los seis que el Gobierno regional ha anunciado que privatizará completamente\]. ¿Hacía falta Coslada? ¿Lo abrieron para cerrar este?”, se pregunta un cirujano que trabaja en el centro desde 1999. “Todo lo que se les complica a ellos nos lo traen aquí”, añade. “Y resulta que nos cierran a nosotros”.

Los profesionales con los que ha hablado este diario, algunos de ellos directivos, repiten expresiones como “ocurrencia”, “improvisación”, “dislate”. “¿A quién se le ha ocurrido? ¿En base a qué estudios económicos, de eficiencia o de relación coste-beneficio?”, se pregunta uno de ellos. Muchos creen que el Gobierno regional dará marcha atrás cuando se dé cuenta de las consecuencias. Mientras tanto, los trabajadores seguirán saliendo a la calle con una pancarta donde se lee: “Defendemos tu salud”.

El nuevo Hospital Geriátrico de La Princesa

Hoy, saliente de guardia, y después de una concentración en la puerta del hospital y otra en la consejería de sanidad, he decidido utilizar el blog para divulgar la noticia que nos dieron ayer, prepuente, a las 15h de la tarde: "EL HOSPITAL DE LA PRINCESA SE TRANSFORMARÁ A PARTIR DE ENERO DE 2013 EN UN CENTRO SUPERESPECIALIZADO EN PATOLOGÍA CRÓNICA DE LAS PERSONAS MAYORES". Ojo, no un geriátrico como se podría pensar, sino un "centro superespecializado en patología bla, bla, bla". Suena superguay, eh? Por lo que hemos podido enterarnos hasta ahora (ya que todo esto se ha comunicado ayer a última hora en reunión urgente a los jefes de servicio), desaparecerán del hospital las especialidades, el servicio de Urgencias y los laboratorios. Según nos han dicho, los pacientes del área 2 quedarán distribuidos entre el Hospital Clínico y el Gregorio Marañón, el personal con plaza fija será reubicado en los distintos hospitales, los eventuales (médicos, enfermeros, auxiliares, celadores, que llevan trabajando muchos de ellos más de 10 años en el hospital) serán despedidos, y los más de 300 residentes que se forman en el hospital serán dispersados no se sabe muy bien hacia dónde. Todo esto parece ser que es rentable. Sin embargo, en los últimos 2 años, Sanidad ha invertido diversos pastones en el Hospital de La Princesa: - En el último año se ha informatizado todo el servicio de Urgencias (que ahora desaparece). - Se han reformado completamente los laboratorios de microbiología y de análisis clínicos, este último recién estrenado hace apenas 2 meses (que ahora desaparecen). - Se ha adquirido un acelerador lineal para el servicio de Oncología Radioterápica (que desaparece) y una máquina de fotoaféresis extracorpórea para Hematología (que también). - Se ha hecho nueva toda la planta de trasplante hematopoyético, estrenada en enero de este año (que desaparece) - Y más... Así se hace la gestión del gasto sanitario en España. Eso sí, se han abierto 6 hospitales privados. Con el Carlos III de Getafe van a hacer algo parecido. Ayer por la tarde, recién difundida la noticia, nadie de los que estábamos de guardia nos lo podíamos creer. Esta noticia es del 29/10/12: http://ecodiario.eleconomista.es/salud/noticias/4359229/10/12/Madrid-Historia-electronica-e-Ipads-en-Urgencias-mejoran-la-seguridad-de-los-pacientes-del-Hospital-de-La-Princesa.html Dos días después, el Hospital de La Princesa queda convertido en un geriátrico, sin servicio de Urgencias. ¿Qué clase de broma es esta?