sábado, 23 de junio de 2012

Los videojuegos de mi vida y de cómo yo llegué a escuchar música del infierno.

Miki ha publicado este post en su blog, en el que habla de las pelis, música y videojuegos que influyeron en su adolescencia temprana y lo convirtieron en el friki que hoy es. No voy a hablar de cine porque escribiría párrafos y párrafos sobre Star Wars. En cuanto a videojuegos he aquí mi vasta experiencia: Empecé fuerte con estos dos, en casa de mi prima Sofi (eran de su hermano y nos pasábamos el día jugando): (Éste era muy divertido, se trataba de coger discos y lanzar cajas contra viejas que iban en carritos, mientras sonaba la musiquilla de los blues brothers!) Después, en casa de mi amiga Esther (del cole), empecé a jugar mucho al "matar marcianitos" (yo en esa época lo llamaba así y no tenía ni idea de su nombre real) Unos años más tarde, calculo que con 9-10, en la casa de Guadarrama de mis abuelos jugaba con mis primos a éstos: Y cuando tenía unos 11-12 años, tuvimos en casa nuestro 1er ordenador. No te sé decir qué tipo de ordenador era pero vamos, te lo imaginas, uno de esos con monitor gigante, que heredamos de mi tío que ya no lo quería. Entonces me enganché a estos dos: Supongo que ya entonces para la edad que tenía, iba con bastante retraso. Y después de esto, la verdad es que no he avanzado mucho más. - He jugado al mario/wario/similares pero sólo en la Game Boy que le regalaron a mi hermano por su comunión. - Después, he jugado al Sim City, pero no se me daba muy bien, los ciudadanos nunca estaban contentos con las tasas. - Le he fastidiado varias veces a mi hermano sus partidas del Age of empires (descubrí que si escribías "Black death", se acababa la partida). - He jugado al Worms y me gustó mucho, pero creo que la última vez que jugué fue en bachillerato (lo recuerdo porque tengo la imagen de jugar con un chico que me re-encantaba por aquellos tiempos, y cuyo nombre nunca revelaré porque sólo lo sabía mi mejor amiga del cole, y eso porque ella al chico ni lo conocía). - Y por último, he pasado tardes de verano jugando a aventuras conversacionales (recomiendo las del Dr. Van Halen), y al Mario Kart. Ahí acaba mi conocimiento sobre videojuegos. Y en cuanto a música (si te aburro no sigas leyendo, si no, aténte a las consecuencias!): Dice Miki en su blog (ver link arriba) que su época esponja fue entre los 11 y 16 años. La mía empezó más tarde. Yo hasta los 15 años siempre fui la típica (en estos tiempos que corren ya no tan típica) niña dulce y dócil, que decía sí a todo lo que le decía un adulto, no hablaba en clase sin levantar la mano, y creía que tenía opiniones propias pero en realidad eran inculcadas por los adultos de su alrededor. Me gusta echarles la culpa a las monjas del cole (o mejor dicho, a la educación recibida en el cole de monjas), pero probablemente no fue culpa suya, o al menos no del todo. El caso es que empecé a espabilar en el verano de 2001. Ya ves, tardísimo. Por esa época yo escuchaba cosas como Ella baila sola, Gloria Stefan, Emilia (ya ves), Estopa o Maná. Ese mes de julio fui a una especie de campamento, con una beca del MEC para participar en un "programa de recuperación y utilización educativa de pueblos abandonados". Me tocó el pueblo de Granadilla, en Cáceres. Por cierto, una pasada de pueblo abandonado amurallado, te recomiendo que luego te des un paseo con googlemaps. Yo entonces era hiposocial, pero aún así me lo pasé bastante bien. Vivíamos en las casas abandonadas del pueblo, hacíamos actividades como si fuéramos habitantes del pueblo y cada día te tocaba una cosa: jardinería, agricultura, albañilería, granja, cocina, telares, taller de mimbre... hasta apicultura. Por la tarde nos llevaban al embalse de Gabriel y Galán, que estaba al lao del pueblo y hacíamos piragüismo, y también hicimos una marcha por el bosque en grupillos de 5 con mapa y brújula, con acampada de una noche, y una excursión a Monfragüe. Y por supuesto, una noche de historias de miedo en el cementerio.. Bueno, me estoy yendo del tema. La cuestión es que allí fue donde por 1ª vez tuve contacto con un grupo grande de gente diversa de mi edad, que no eran de cole de monjas. Y especialmente había un chico que estaba piradísimo, y cuya 2ª característica principal era que escuchaba música heavy. Yo en ese momento pensaba: "obviamente, está piradísimo, escucha heavy, no puede ser una cosa sin la otra".. o algo así. Pero bueno, quitando eso, era un chico que no llamaba la atención por su aspecto (no llevaba ropa del infierno) y con el que no era especialmente difícil relacionarse. Y la cosa se quedó en eso. Entonces se acabó el campamento, llegó agosto, nos fuimos a Guadarrama y me encontré con Santi, el otro de mis amigos de allí, al que llevábamos 2 años sin ver (el verano anterior no se dignó aparecer por allí, y entonces apenas empezábamos a tener móviles). Sin ofender, Santi era un empollón. Y ya desde pequeño un friki de la historia medieval, los templarios y similares. Pero en general el concepto que yo tenía de él era bueno, 1º porque era un empollón y sus padres eran profes, 2º porque iba a misa los domingos (sí, así de simple era mi razonamiento, y eso que yo nunca he ido a misa los domingos). Y entonces de pronto resultó que estaba flipadísimo con grupos como Rhapsody, Blind Guardian y compañía. Y mi triste razonamiento simple y cóncavo fue: "Pues si Santi lo escucha, igual no va a ser tan malo..", y entonces le pedí un portaCDs que tenía él con mogollón de CDs de mogollón de grupos. Y recuerdo perfectamente que el 1º que escuché fue Dawn of Victory, y me moló mazo. Y entonces escuché por 1ª vez a Dream Theater. La 1ª canción que oí fue Surrounded, la 2ª Through her eyes y la 3ª Space-Dye Vest, y no tengo ni idea de por qué fueron en ese orden porque cada una es de un disco diferente. Cuando volvimos a Madrid quedé un fin de semana con Clara y Carlos y me acompañaron al Madrid Rock, y ahí me compré mi 1er disco, Metropolis Pt. 2 (Scenes from a memory). Piensa que antes no teníamos dinero ni spotify para pre-escuchar las canciones, yo creo que ni siquiera el e-mule era popular todavía, y si te gastabas la pasta en un CD tenías que elegirlo bien y en el fondo hasta te estabas arriesgando un poco si sólo habías oído 2-3 canciones. En cuanto lo escuché, me enganchó como nada en la vida. Después, a la vez que iba conociendo DT, BG, Rhapsody, Maiden.. empecé a escuchar otros grupos que le gustaban a mi amiga Adriana, y así conocí Marea y Extremo. Luego espontáneamente me fui del cole al instituto y allí conocí gente que escuchaba esas cosas, y con los que me llevé muy bien (aunque perdí totalmente el contacto) y así se me fueron quitando los prejuicios. Y entonces empezó a hacerme ilusión ir en el metro con mis casquitos y que se me sentara al lado un tío (o tía, aunque era más raro) con una camiseta de un grupo heavy, y empecé a buscar como loca en el rastro camisetas de DT, pero nunca encontré ninguna de mi talla :( En febrero de 2004 (en 2º de carrera), que fue sin duda la peor época de mi vida hasta ahora, fui a un concierto de DT (el único al que he ido). Imagina, yo en esas fechas me pasaba el día entre estudiar para los exámenes y llorar porque me gustaba pero mazo un amigo al que no le gustaba yo y que empezó a salir con mi mejor amiga. A veces me daban unas crisis de ansiedad que me tenía que encerrar en mi habitación y tumbarme en la cama porque me mareaba y todo de la hiperventilación. Y en medio de eso, precisamente con este chico y con un amigo suyo, fui al concierto. Y no te digo la frase literal que pensé porque me da vergüenza decirla en público (porque va con una aclaración humillante), pero me la puedes preguntar y te la contaré. Y el resto, desde entonces hasta ahora, creo que ya lo sabes...

martes, 19 de junio de 2012

Actualizando el blog y la mentalidad

Últimamente estoy filosófica. Sobre todo después de una conversación extraña que quizá no fue en sí tan importante, pero que sí me está haciendo pensar muchas cosas ya desde hace unas semanillas. Tanto la conversación como la postconversación. Yo me entiendo. Así que empecé a escribir un post laaaargo, pero viendo que en realidad no iba a contar nada de la conversación en sí y que sólo iba a hablar con frases ambiguas, al final he decidido borrarlo y escribir sólo una nota, más que nada para tenerlo yo presente. Mi conclusión, en resumen, es que hay tantas formas de pensar como personas, y que a veces hay que ver las cosas desde la perspectiva de otro para darte cuenta de cuáles son las cosas que tienes que cambiar en tu vida. Seguramente para ti no es una gran revelación. De todas formas ya hacía tiempo que no escribía por aquí. Hace unos días vi esta foto en un facebook ajeno: No sé de qué es la foto ni me voy a molestar en investigarlo. Y tampoco es que no sea feliz (que bueno, ya sabes, no lo soy, pero no creo que sea por estar soltera aunque tú puedas pensar que es por eso). Lo importante era la 2ª parte: Get a life, then share it. Y extrapolando a la vida cotidiana, ésa es la diferencia entre jorgito y yo, o entre quien quiere hacer cosas y quien dice que le gustaría hacer cosas. Así que, a partir de ahora, se acabó lo de soñar con mariposas (metafóricamente, eh?) y esperar a que las cosas vengan. Como dicen, "you want it, you take it, you have it". Si alguna vez ves que se me olvida, recuérdamelo! Sometimes, your castles in the air and the fantasies you´re seeking, are the crosses you bear.